
Ed Ethridge, del Centro Marshall para Vuelos Espaciales de la NASA ha propuesto una manera muy terrenal de hacerlo. Simplemente utilizando un microondas. El método consistiría en hacer incidir un haz de microondas sobre el polvo lunar, de manera que éste es absorvido por el suelo y así de esta forma, al calentarse, recolecte el vapor de agua en un condensador de frío. Gracias a este descubrimiento se están poniendo en marcha nuevas tecnologías que ayuden a obtener el preciado líquido.
Más información en noticias de la NASA.