
Si ya el telescopio Hubble es potente, ya nuestra imaginación se queda corta si lo juntamos con el telescopio
Spitzer. La unión de lo óptico y lo infrarrojo es lo que ha conseguido observar galaxias sólo mil millones años de la creación del Universo conocido en proceso de creación de los primeros elementos pesados. La
imagen en
hubblesite.org nos hace recordar lo ínfimo que somos y lo grandioso que es el espacio exterior.
Desde
cienciakanija.com nos ofrecen una traducción al castellano del sitio original.